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LA AUTOPOIESIS DE LA ARQUITECTURA
Patrik Schumacher en conversación con Loreto Flores
Published in: revista de arquitectura, numero 23, Arquitectura escrita – Written architecture
Facultad de arquitectura y urbanismo de la Universidad de Chile, primer semester 2011

 

Patrik Schumacher es socio de Zaha Hadid Architects, director del Design Research Lab (DRL) de la Architectural Association en Londres y profesor en varias universidades europeas. Durante más de 15 años ha desarrollado estas tres actividades en forma paralela lo que ha permitido pensar, experimentar y hacer arquitectura con una  postura de vanguardia.  Esta experiencia lo impulsó a escribir  “La Autopoesis de la Arquitectura”, un extenso tratado -como él lo ha definido-  cuyo objetivo principal es presentar un discurso global de la arquitectura, generado al interior de la disciplina. Escritos, conversaciones cara a cara con profesores, estudiantes, colegas y Zaha Hadid fueron su estímulo. Los trabajos del sociólogo alemán Niklas Luhmann y los biólogos chilenos Humberto Maturana y Francisco Varela, la inspiración decisiva. “Sé que es un libro de mayor significancia para los arquitectos, pero creo que también debiera de captar la atención de otras disciplinas interesadas en entender la arquitectura como una expresión cultural contemporánea”, señala.

 

 

P. Sch: Antes de comenzar la entrevista y contestar tus preguntas, quisiera expresar mi admiración por el trabajo de Humberto Maturana y Francisco Varela. El concepto de autopoiesis y la expansión del concepto de cognición de Maturana, ha sido extraordinariamente productivo. Lo mismo aplica para el concepto de mente encarnada (embodied mine) de Varela.

1) LF: Usted ha señalado que el espíritu y misión de su libro “La Autopoiesis de la Arquitectura” es producir un impacto en la arena arquitectónica por medio de la presentación de un sistema teórico integral. ¿Cuál es la importancia de esta sistematización y cuáles son las implicancias en la escena arquitectónica contemporánea?

P. Sch: La necesidad urgente de una nueva sistematización de los recursos intelectuales de la disciplina, está relacionada con la ambición de estimular la actual convergencia de la vanguardia - el Parametricismo- dentro de las corrientes principales de pensamiento actuales. Liderar estas corrientes, implica tomar toda la responsabilidad en el desarrollo profundo del medio ambiente construido. Esto requiere un razonamiento exhaustivo y la reafirmación de los valores fundamentales, métodos y repertorios de  la arquitectura, sobre la base del entendimiento de su función social, y reflexionar además, acerca de cómo esta función propone tareas concretas en el contexto histórico actual: Una sociedad de redes Post-fordista.
El hecho es que la autopoiesis de la arquitectura – arquitectura como discurso, disciplina académica y profesión- no ha estampado su sello en el medio ambiente construido global desde la desaparición del Modernismo. Treinta años de experimentación de vanguardia arquitectónica, tienen todavía que producir resultados que impacten decisivamente al mundo. Mi tratado, integral y sistemático debiera estimular y guiar a la vanguardia actual para intentar alcanzar la hegemonía de las corrientes principales de la arquitectura.
 
2) LF: Si la arquitectura está constituida por un discurso propio y autónomo, ¿Por qué la decisión de usar términos provenientes de otras disciplinas? Cuál es la ventaja de entender la arquitectura como un sistema autopoiético?
P. Sch: La autonomía de la arquitectura significa autodeterminación en el discurso. Ni filósofos, científicos, políticos o clientes pueden gobernarla. La disciplina es autónoma en su esfuerzo por mantenerse relevante y productiva; pero al mismo tiempo, para sobrevivir, debe permanecer relevante y productiva para la sociedad. Esto es lo que Luhmann llama “apertura por medio del cierre” (“openness through closure”). La disciplina tiene que observar e interpretar su medio ambiente social para responder pertinentemente con sus propios términos. La abstracción autorreferencial de la Autopoiesis, es una condición pre existente para respuestas más sofisticadas y productivas a los desafíos de la sociedad.
Una relación similar de observación e interpretación existe también entre arquitectura y filosofía y entre arquitectura y ciencia. La arquitectura observa estas disciplinas en busca de inspiración y guía para actualizar sus propias capacidades intelectuales. La filosofía es un recurso especialmente importante. De hecho, ésta actúa como un centro de intercambio de recursos intelectuales, esquemas conceptuales, principios metodológicos, etc. y los filósofos son los que abstraen y generalizan esquemas y metáforas más avanzados desde varias disciplinas individuales.
La Arquitectura no se puede excluir de este desarrollo intelectual general. Sin embargo, cuando adopta conceptos y argumentos lo hace sobre la base de sus propias necesidades, intereses y criterios de relevancia. La adopción es así una interpretación - adaptación. Lo que cuenta es que los términos importados tengan sentido dentro del campo de estudio; es decir, dentro del discurso autopoiético de la disciplina, sin apelar a autoridades externas.
Lo mismo aplica a la adopción específica del concepto de autopoesis en mi discurso. Las respuestas dentro de la arquitectura son las que importan ahora, no la autoridad de expertos en la teoría de autopoesis fuera de la arquitectura. Esta postura es la misma que Luhmann formuló a través de su apropiación del concepto de autopoesis en sociología. Ciertamente, la  autodescripción arquitectónica sobre la base de la teoría de la comunicación es un aporte de la teoría de la sociedad de Luhman.
Acerca de las ventajas de usar el concepto como base para una autodescripción de arquitectura, éstas no pueden ser resumidas en pocas palabras. Finalmente serán los logros y éxitos del libro los que dirán.

3) LF: Usted ha señalado que “el intento de construir una teoría unificada cruzando un campo de teorías específicas tiene como objetivo testear la consistencia de éste. ¿Cuál es su primera conclusión acerca de esto después de haber terminado el primer volumen de su libro?
P. Sch: No, una teoría unificada no puede probar la consistencia del campo completo, sino sólo testear las perspectivas e ideas del autor o quizás las ideas de cierto movimiento. No obstante, la arquitectura es un sistema de comunicaciones individual, está llena de opiniones y teorías en conflicto y un sistema de este tipo existe en la medida que todos estos elementos se referencien y debatan entre sí. Un sistema teórico unificado es otro tema. Se trata de seleccionar un subconjunto coherente dentro de la totalidad de teorías en circulación y abarcar todos los aspectos, cuestionamientos y tareas de la disciplina. Pienso que, hasta que mi teoría sea cuestionada y desmentida, he tenido éxito en construir una teoría unificada en ese sentido y el punto central de ésta, es la explicación de la función social de la arquitectura.

4) LF: “Una perspectiva global y coherente es lo necesario para ofrecer un liderazgo efectivo a una firma que busca innovar a través de un amplio espectro de tareas programáticas. ¿Es esta falta de coherencia lo que ha reducido la importancia de los arquitectos en los procesos urbanos contemporáneos? ¿Cómo concibe nuestro rol como profesionales hoy en día?
P. Sch: Sí, esa es mi evaluación. La arquitectura carece de impacto e importancia porque nuestra vanguardia no está completamente preparada para provocar interés  global. Una perspectiva convincente, integral y coherente es lo que se requiere para recobrar valor y trascendencia. Al interior de Zaha Hadid Architects hemos logrado una agenda de innovación congruente a través de diferentes programas y escalas. Pero sólo una firma o un pequeño grupo de ellas, no puede cambiar la fisonomía del medio ambiente construido global. Necesitamos la disciplina como un todo - o por lo menos segmentos significativos de ésta - para progresar en la dirección trazada por nosotros y otros, trabajando de acuerdo al nuevo paradigma del Parametricismo.

5) LF: La Arquitectura como sistema de comunicaciones no es una mera colección de artefactos, forma de conocimiento o práctica profesional particular; sino más bien, abarca estas tres categorías: artefactos, conocimiento y prácticas- entendidas como comunicaciones que se conectan entre sí, en una red recursiva en constante desarrollo. Sin embargo, nuestra forma de comunicarnos y servir a la sociedad es a través de edificios. ¿Cómo podemos otorgar además importancia a nuestro discurso teórico?
P. Sch: La teoría arquitectónica es sólo para arquitectos, es parte del discurso interno de ésta.No espero que una audiencia más amplia se interese en ella. Es ciertamente un discurso para expertos y por ello escribí mi libro sólo para arquitectos y teóricos de arquitectura (además de diseñadores). El público general no tiene necesidad de entender la teoría, ya que los arquitectos se comunican con él a través de edificios y espacios diseñados. Estos constituyen un tipo de comunicación muy específico: actúan como instancia e invitación para una interacción cara a cara entre personas presentes en el mismo espacio. La función social del diseño urbano y arquitectónico es entonces, enmarcar la comunicación social de forma innovadora.

6) LF:De acuerdo a la teoría de autopoiesis de la arquitectura- La antigüedad clásica marca la primera aparición de la arquitectura, pero es el Renacimiento Italiano el momento histórico que define el verdadero comienzo de la autopoesis de la arquitectura. ¿Considera que las construcciones vernaculares son parte del sistema autopoiético de la arquitectura?
P. Sch: No, las construcciones vernaculares no pertenecen a la arquitectura. Yo distingo estrictamente entre edificios subordinados a la tradición y arquitectura como disciplina teórica e innovadora, basada en la separación de diseño y construcción. Dicha separación ocurrió en el Renacimiento Italiano, sólo entonces el diseño arquitectónico emergió acompañado de dibujos, teoría y arquitectos-autores. Este fue el big bang de la arquitectura, ocasionando una enorme aceleración en la evolución del medio ambiente construido en concordancia con el desarrollo de la sociedad. Nunca antes los edificios fueron diseñados y discutidos completamente sobre papel y el uso de este medio y de la perspectiva, facilitó la aparición de un discurso crítico y especulativo en diseño.
Por otro lado, los edificios son comunicaciones arquitectónicas sólo en la medida en que respondan y estén incorporados al discurso de la disciplina. En este sentido, una estructura o sistema de construcción vernacular -aunque no es arquitectura per se - puede ser incluida en el discurso,  sólo si un arquitecto o teórico refiere a esa estructura dentro de su discurso; esto sucedió por ejemplo, cuando Bernard Rudofsky publicó su libro “Arquitectura sin Arquitectos”. Se requiere de un arquitecto o de un teórico para incluir edificios vernaculares dentro del dominio de la arquitectura.No puede haber arquitectura sin autor como punto de referencia.

7) LF: ¿Por qué las Escuelas de Arquitectura debieran transformarse en laboratorios experimentales? ¿Cuál es su rol dentro de la autopoiesis de la arquitectura?
P. Sch: El rol de algunas escuelas de arquitectura (no todas) es desarrollar investigación en diseño arquitectónico y contribuir, de esta forma, a la vanguardia de la disciplina. (Aquellas escuelas que simplemente otorgan capacitación sin una contribución innovadora pertenecen al sistema de educación más que a la arquitectura). Ya que no existen institutos de investigación especializados dentro de la arquitectura, son las escuelas, así como también las oficinas de vanguardia, las que tienen que emprender la tarea de investigar y experimentar. Sólo  a través de la diferenciación entre vanguardia y lo convencional, la arquitectura puede sobrellevar la acelerada demanda por innovación, al mismo tiempo que entregar soluciones que reflejen el estado del arte con respecto a las tareas inmediatas.

8) LF:“Los límites de nuestro lenguaje de diseño son los límites de nuestro pensamiento de diseño. Cómo representamos la arquitectura, determina cómo anticipamos (diseñamos) la arquitectura. ¿Es el Parametricismo la más reciente extensión de nuestros límites de pensamiento arquitectónico y de diseño?
P. Sch: No, el Parametricismo es un estilo más que un medio de diseño y es el medio de diseño el que define los límites de nuestro pensamiento. Sin embargo, el Parametricismo depende de los nuevos métodos de diseño y es, por lo tanto, el estilo más eficaz para ampliar el universo de posibilidades proporcionadas por éstos. Los nuevos medios de diseño digitales han expandido los límites de nuestro pensamiento de diseño: modelamiento de subdivisión de superficies y modelamiento desde NURBS (Non-Uniform Rational B-Splines), sistemas dinámicos (casi físicos) de fluidos, pelo y tejidos (fluids, hair and cloth). Más aún, estoy hablando acerca de un universo de modelamiento asociativo.
La idea y posibilidad de programar asociaciones (dependencias) entre las variables de un modelo paramétrico abren un nuevo campo de pensamiento: el pensamiento en términos de variaciones y correlaciones, así como en términos de genotipos que contienen virtualmente una variedad infinita de fenotipos. El estatus y significado de un modelo cambia: es sólo un momento efímero o un punto dentro del continuo de posibilidades, el  fenotipo de un genotipo subyacente que proporciona la estructura topológica y lógica del modelo.

9) LF: Si el Parametricismo produce un proceso de diseño más abierto y flexible, ¿Puede ser reconocido como una forma más democrática de diseñar? ¿Cuáles son las diferencias con el Modernismo?
P. Sch: No diría que el Parametricismo es una forma más democrática de diseñar, sino más bien, una forma más versátil y adaptable. Puede (pero no debe) funcionar desde abajo hacia arriba, es decir, como un proceso emergente, por ejemplo, cuando se usa programación generativa o sistemas basados en agentes. El Modernismo en cambio, es siempre un proceso deliberado, desde arriba hacia abajo, sin importar si se está moviendo por agregación desde adentro o vía substracción y división desde fuera. Sus elementos compositivos primarios son los mismos que los de la arquitectura clásica: figuras geométricas rígidas como cubos, cilindros, esferas y pirámides y sus composiciones, por lo tanto, está siempre restringido a un puñado de estas figuras.
En el Parametricismo, en cambio, todos los elementos pueden ser paramétricamente manejados. Esto les permite adaptarse a los otros elementos así como también a las condiciones de su contexto. En lugar de repetición, este estilo promueve la diferenciación y en lugar de simple yuxtaposición, la correlación. Cada acción convoca una reacción, es decir, la deformación codifica información. Todo esto contribuyó al gran logro del Parametricismo: la intensificación de las relaciones al interior de un edificio y de éste con su contexto, lo que responde a la creciente y cada vez más compleja demanda de la sociedad por comunicación.
La sociedad de redes Post-fordista está caracterizada por una creciente diversidad y complejidad de los escenarios de comunicación - estado de una sociedad funcionalmente diferenciada. Permanecer productivo dentro de ésta, requiere un nuevo nivel en la intesidad comunicativa de cada individuo. Los flujos deben ser continuamente coordinados y actualizados dentro de una red compleja y la expresión arquitectónica más pertinente es un campo de simultaneidad: es decir, espacios urbanos donde se presente una rica variedad de ofertas comunicacionales. El campo visual está estratificado en todas las direcciones, frente, sobre y abajo. Esta multiplicidad está ordenada de acuerdo a gradientes y leyes de correlación, de modo que capas que están escondidas puedan ser deducidas desde las capas visibles. Navegación y orientación son fundamentales, así como también la atmósfera de interacción social, planteando tres aspectos cruciales de la misión de la arquitectura: organización, articulación y significado, que juntos constituyen el núcleo de su competencia como disciplina. Esto nos conduce desde el espacio moderno a los campos paramétricos.

10) LF: Considerando la agenda global actual, ¿Cómo aborda el Parametricismo el tema de la sustentabilidad?
P. Sch: El desafío ecológico está entre los momentos determinantes de nuestra época. Su impacto sobre la arquitectura y el urbanismo contemporáneos se sitúa sólo después del desafío planteado por la dinámica y complejidad de la sociedad Postfordista. Ciertamente, el paradigma general de los “sistemas ecológicos” se aplica a ambos, y está considerado como paradigma fundacional del Parametricismo. Los mismos conceptos de diseño, técnicas y herramientas que permiten a los arquitectos contemporáneos intensificar la complejidad comunicacional del medio ambiente construido, son también adecuados a la agenda de optimización de formas arquitectónicas en relación a criterios ecológicos.
Resultados morfológicos variables pueden ser programados para responder a parámetros medioambientales. Por ejemplo, un sistema de datos, como un mapa de exposición solar que entrega las intensidades de la radiación a las que una fachada está expuesta durante un tiempo determinado, puede transformarse en información para la modulación adaptable de un sistema de sombreado: a medida que este sistema envuelve  la fachada, la forma, distanciamiento y orientación de los elementos individuales se adapta gradualmente a las condiciones específicas de exposición en cada zona de la fachada. El resultado es un gradiente, un patrón que cambia continuamente para optimizar la protección solar de acuerdo a la entrada de luz. Al mismo tiempo, esto le otorga al edificio una estética orgánica que hace además legible su orientación en el contexto, facilitando la comprensión y navegación en el medio ambiente urbano: la fachada contiene y trasmite información acerca de su posición en lugar de  permanecer indiferente y ciega. El mismo principio está siendo aplicado a la actividad y parámetros del proceso de vida urbano. La desorientación, neutralidad genérica y monotonía del Modernismo da espacio a la elocuencia y adaptación ecológica del Parametricismo.

11) LF: ¿Cómo puede la arquitectura ser un sistema autónomo y socialmente innovador al mismo tiempo?
P. Sch: La arquitectura sólo puede ser innovadora siendo un sistema autopoiético. Ese es un hecho histórico. Antes de la emancipación de la arquitectura, el medio ambiente construido fue reproducido sin cuestionamiento de acuerdo a la tradición e inmerso  en la reproducción general de la sociedad y sus instituciones. En ese período de la historia -en los tiempos del feudalismo, por ejemplo- el poder político, legal, económico e ideológico así como el control sobre el medio ambiente construido, estaban concentrados en la parte superior del orden jerárquico.
La emancipación de la arquitectura surgió junto a la de los otros dominios que ahora estructuran una sociedad funcionalmente diferenciada. Todos estos sistemas son autopoiéticos y desde ese momento de diferenciación, el desarrollo de la sociedad se aceleró. Cada sistema puede desplegar su propia dinámica sin estar subordinado a los otros, pero con la obligación de adaptarse entre sí, sobre la base de sus propios términos, para ser finalmente juzgado (aceptado o rechazado) por el resto.

12) LF: Antes del lanzamiento del Volumen I, usted realizó una serie de charlas para estudiantes. ¿Cuáles fueron los objetivos y conclusiones de esos encuentros? ¿Aspira usted a que su libro sea material de discusión en las escuelas de arquitectura?
P. Sch: Ciertamente, el libro será más relevante para aquellas escuelas que se ven a sí mismas como participantes activos y creativos en el progreso de la arquitectura más, que simplemente instituciones de capacitación. El libro está dirigido a la vanguardia de la arquitectura; esto incluye a los estudiantes más ambiciosos. 
Acerca de las charlas, éstas fueron de hecho seminarios que permitieron una gran cantidad de retroalimentación y preguntas. Creo que fueron una experiencia de aprendizaje para todos aquellos que participaron, incluyéndome. El Volumen I estaba terminado, pero las discusiones tuvieron cierto impacto en el Volumen II, el cual acaba de ser  terminado.

13) LF: Como establece la tesis principal del libro, la arquitectura es un sistema cerrado que se comunica con otros sistemas. ¿Piensa usted que este libro permitirá que nuestra disciplina sea entendida más claramente por otras disciplinas? ¿Ha recibido algún comentario al respecto?
P. Sch: Creo que el discurso interno dentro de la arquitectura es más importante. No obstante, sería beneficioso si nuestros colaboradores más cercanos -como los ingenieros que forman parte de nuestros equipos de diseño- obtuvieran una mejor idea de la razón de ser y la función social de la arquitectura a diferencia de sus propios roles y preocupaciones. Más aún, uno podría esperar que algún interés se desarrollara en el amplio campo de los Estudios Culturales e Historia de la Cultura.
Personalmente, el reconocimiento dentro de la sociología me daría mucha satisfacción. Después de todo, el libro contiene una especie de análisis sociológicamente informado acerca de  la arquitectura como disciplina, así es que los sociólogos podrían estar interesados. De hecho, poco después de la publicación del Volumen I, comencé una extensa correspondencia electrónica con el sociólogo alemán Dirk Baecker. Él se tomó el tiempo de leer y discutir mis ideas y después de duros debates, pude convencerlo -al parecer- de mis ideas generales acerca de la arquitectura. Su juicio es especialmente interesante porque él fue uno de los discípulos más cercanos de Luhmann y aún se mantiene como uno de sus seguidores más potente y original.

14) LF: “La Autopoiesis de la arquitectura”, Volumen II estará disponible este otoño. ¿Podría darnos un avance de los principales tópicos que serán abordados en esta segunda parte? Ha hecho algún cambio o incluído nuevos temas después de la recepción crítica del Volumen I?
P. Sch: El Volumen I – subtitulado: Un Nuevo Marco de Trabajo para la Arquitectura - introduce un nuevo marco teórico dentro del cual la arquitectura puede analizar y confrontarse en términos de sus conceptos, métodos y valores fundamentales. El Volumen II –subtitulado: Una Nueva Agenda para la Arquitectura- continúa analizando el discurso arquitectónico y propone una nueva agenda en respuesta a los desafíos y oportunidades generados por el actual desarollo de sociedad y tecnología. Este volumen finaliza con un manifiesto del nuevo estilo, el Parametricismo, promovido como candidato a transformarse en el estilo unificador del siglo XXI.
 La teoría de la autopoesis arquitectónica, es una teoría-reflexión o autodescripción de la arquitectura formulada al interior de la misma. Como tal, su objetivo es contribuir a la autodirección de ésta y como toda teoría de reflexión - la  teoría económica, la jurisprudencia, la epistemología de la ciencia y las políticas teóricas- oscila entre modos descriptivos y normativos. Por medio de la descripción, conceptualización, sistematización y reconstrucción de la racionalidad de la historia de la arquitectura y su estado actual, la teoría reúne la conectividad interna necesaria para hacer demandas normativas y proyecciones plausibles. La tensión entre los momentos descriptivos y normativos se extiende en la totalidad de “La Autopoesis de la Arquitectura”.Sin embargo, el balance entre los dos momentos es diferente en los dos volúmenes. Desde el Volumen I al II, a medida que nos movemos desde el marco de trabajo hacia agenda,el balance se inclina hacia el polo normativo e incluye efectivamente más especulaciones y proyecciones.
El manuscrito del Volumen II fue terminado a principios de este año, por lo tanto, no hubo mucho tiempo para reaccionar a las críticas. No obstante, algunos de los comentarios al Volumen I me permitieron clarificar y reforzar algunos puntos, pero no hubo ningún cuestionamiento fundamental que haya hecho cambiar mi postura.
La crítica se focaliza en el Parametricismo: algunos críticos rechazan el que lo haya promovido dentro de mi tratado. Es cierto que, como teoría general de arquitectura, la autopoesis puede ser separada del Parametricismo y tener un valor independiente de cualquier compromiso con éste. Sin embargo, para mí, las referencias a este estilo proporcionan posibilidades concretas (inciertas pero convincentes).Las teorías necesitan ser fértiles, deben ser exploradas y conducidas para hacer diferencia en la práctica de diseño; esto significa que tienen que intervenir en el debate acerca de la dirección futura de la arquitectura. En el Volumen II, el compromiso con el Parametricismo se vuelve aún más explícito, ofreciendo además una guía específica para un desarrollo más innovador. Pero, una vez más, la mayor parte de los puntos de vista y argumentos expuestos pueden ser apreciados y defendidos sin adherir a mi compromiso con el Parametricismo.

Patrik Schumacher, “La Autopiesis de la Arquitectura, Volumen I - Un Nuevo Marco de trabajo para la Arquitectura”, John Wiley &Sons, Londres, 2011

 

 

(1) Patrik Schumacher. Estudió Filosofia y Architectura en Bonn, Londres y Stuttgart, donde recibió su Diploma de Arquitectura en 1990. En 1999 completó su Doctorado en el Instituto de Ciencias Culturales de la Universidad de Klagenfurt. Se unió a Zaha Hadid Architects en 1988 y es actualmente socio de la oficina.
En 1996 junto a Brett Steele, fundó el “Laboratorio de Investigación en Diseño” (Design Research Laboratory DRL) en la Architectural Association en Londres, del cual continúa siendo co-director hasta ahora. Desde 2004, es Profesor en el Institute for Experimental Architecture en la Universidad de Innsbruck y actualmente es profesor invitado en la Universidad de Artes Aplicadas de Viena. Su extenso trabajo teórico está disponible en www.patrikschumacher.com

(2) Loreto Flores es Arquitecto de la Universidad de Chile y  MArch Design Research Lab de la Architectural Association School of Architecture(AA). Su trabajo ha sido expuesto en la Bienal Internacional de Arquitectura de Beijing, AA Projects Review y AA Open Jury,  en Londres y publicado en AD Magazine, “Collective Intelligence in Design” (2006) y “Architextiles (2006). “Netlab”, su tesis de Master fue galardonada con el FEIDAD Design Merit Award 2006. Desde ese  mismo año trabaja en Zaha Hadid Architects, donde ha colaborado en diversos concursos y proyectos en Francia, España, China, Singapur y Egipto.


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